LA LLAVE DE LOS MISTERIOS, JESÚS RELINQUE

No es mi género la fantasía. El sopor se apodera de mí en las primeras páginas de un texto en cuanto se despliegan razas y nombres inventados en un contexto medieval. Prueba con algo de fantasía urbana, me recomendaron. Lo he hecho y aunque el contexto es diferente, mis sensaciones no cambian. La fantasía no está hecha para mí. O al menos para mi yo actual. Mi corazón de niño se estremeció con La historia interminable, Willow o Los goonies.

Lo apuntado no quita que haya disfrutado la lectura de La llave de los misterios, una obra que reedita Kaizen de Jesús Relinque.

Lo que cuenta Relinque es mucho más trascedente y relevante que una historia de fantasía. Como sucede en El señor de los anillos o Canción de hielo y fuego los elementos de fantasía son el atrezo. La historia avanzaría del mismo modo sin la participación de la magia. Hay unos valores más importantes que lo sobrenatural.

No hay trampa ni cartón en La llave de los misterios. Al contrario, la honestidad es palpable. Relinque hace un stranger things a la gaditana. Toma elementos comunes de las historias de aventuras de los años 80, muy al estilo Goonies, las adereza con una capa magistral de nostalgia y nos da en el punto que más nos duele a una generación y, al mismo tiempo, donde queremos sufrir: en el pasado que jamás regresará.

Con toda honestidad, este “producto” (en el mejor sentido del término) no es la primera vez que se prepara. ¿Qué lo hace especial sobre los demás? Precisamente lo que sé de buena tinta que algunas editoriales han encontrado como su talón de Aquiles. Relinque es un tipo inteligente y se ha servido de un producto de gran accesibilidad en pos de destacar un bien mayor: el patrimonio histórico e inmaterial de una ciudad como Cádiz. Se aprecia en sus páginas el amor que el autor siente y lo que la respeta. La llave de los misterios no es solo los enclaves históricos de Cádiz, es también las leyendas que generación lega a las que vienen detrás, es una manera particular en el habla que corresponde a cada gaditano no solo amar y respetar, sino proteger de estandarizaciones tan absurdas como despóticas.

Podemos disfrutar fácilmente de la historia de Juan y sus amigos en el club de los pringados, por supuesto. Podemos maravillarnos de sus aventuras y sufrir con ellos y sus villanos, pero al mismo tiempo, esa cucharada tiene oculta el orgullo por un lugar y sus ramificaciones.

La llave de los misterios nos deja un mensaje claro. Somos capaces de reconocer ciudades de Nueva York, Madrid o Barcelona por un fotograma, una postal o la portada de album, pero al mismo tiempo desconocer las historias ocultas en las ciudades en las que vivimos. Si a todo ello, le sumamos una historia interesante de amor, de amistad, de lealtad y superación, está claro que solo puede resultar una obra que es fácil de leer y aun más de disfrutar.

Comentarios

Entradas populares